Situación global de los derechos de los trabajadores. 12ª edición del Índice Global de Derechos 2025

Por Pablo Zamorano

La Confederación Sindical Internacional (CSI) publicó recientemente el Índice Global de Derechos de 2025. Se trata de la 12ª edición de este informe elaborado por esta organización sindical internacional, siendo la única base de datos de este tipo que ofrece una visión amplia y detallada de la evolución del grado de cumplimiento de los derechos fundamentales y del respeto a las libertades democráticas de los trabajadores a nivel internacional. La investigación reunida en el Índice de 2025 demuestra el auge del autoritarismo, la regresión de los valores democráticos y el aumento de la represión contra los sindicatos y las personas trabajadoras en el mundo.

La entidad que elabora este indispensable material de estudio y análisis sobre las condiciones de los trabajadores a nivel mundial es la Confederación Sindical Internacional (CSI), una organización nacida con el objetivo de unificar el movimiento sindical internacional en el siglo XXI. Surge de la unión, en el año 2006, de la socialdemócrata Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL) y la Confederación Mundial del Trabajo (CMT), de inspiración cristiana y humanista.

El fin de la Guerra Fría, el auge de las políticas neoliberales, las crisis socioeconómicas recurrentes, la fragmentación del movimiento obrero, la globalización económica, el poder creciente de las corporaciones multinacionales y la necesidad de una voz sindical única y fuerte a nivel global fueron la inspiración para la unificación. Hoy  la CSI es la entidad sindical global que representa la corriente mayoritaria del movimiento obrero internacional.

Cabe recordar que es el único estudio anual exhaustivo a nivel mundial que describe la violación de los derechos de los trabajadores, las libertades democráticas y las condiciones de trabajo. Este año deja ver una crisis y un avance grave sobre los derechos y las condiciones de los trabajadores y los sindicatos, reflejando un creciente deterioro de la situación de los obreros y sus organizaciones. Se expone un evidente aumento de las violaciones de los derechos fundamentales, como el acceso a la justicia, el derecho a la libertad de expresión, de reunión y el derecho a la negociación colectiva.

En el marco de un contexto hostil, un número progresivo de autoridades estatales está acogiendo leyes que criminalizan a las organizaciones de la sociedad civil y, de forma muy específica, a los sindicatos. Este mecanismo es acompañado por una deslegitimación de su papel por intermediación de campañas mediáticas. El informe puntualiza que las violaciones del derecho de huelga, del derecho a la afiliación y adhesión a organizaciones sindicales se encuentran en niveles récord.

El informe advierte que nos encontramos ante un ataque concertado y sostenido por parte de las autoridades estatales, las corporaciones y el poder económico contra los trabajadores, sus organizaciones, la democracia y los derechos de los ciudadanos. Este ataque es orquestado por la extrema derecha, gobiernos y grupos hegemónicos multimillonarios decididos a transformar el mundo en su propio beneficio y a expensas de los pueblos.

El Índice 2025 convoca a una acción urgente para resistir este golpe a la democracia y a los trabajadores, antes de que tenga consecuencias irreparables. El informe resalta que el movimiento sindical simboliza el poder colectivo de los trabajadores de todo el mundo. Asimismo, se puntualizan los siguientes datos:

“En el 72% de los países, los trabajadores no tenían acceso a la justicia o tenían acceso reducido a ella, lo que supone un marcado aumento respecto del 65% en 2024”.

“En el 45% de los países se denunciaron ataques a los derechos a la libertad de expresión y de reunión, un récord para el Índice y un aumento respecto del 43% en 2024”.

“El derecho a huelga fue violado en el 87% de los países, sin cambios respecto del máximo del Índice de 131 países en 2024”.

“A lo largo del año, trabajadores de varios países fueron arrestados y procesados por ejercer su derecho a la huelga”.

“El derecho al registro legal de sindicatos se vio impedido en el 74% de los países, sin cambios respecto de 2024 y el peor nivel desde que comenzó el Índice”.

“El derecho a la negociación colectiva se vio restringido en el 80% de los países (121), frente al 79% en 2024”.

“Los empleadores violan con frecuencia los términos de los convenios colectivos, debilitando la eficacia de la negociación colectiva y socavando los derechos de los trabajadores”.

“Las autoridades de 71 países (47%) arrestaron y/o encarcelaron a trabajadores, una mejora marginal respecto a 2024 pero casi el doble de la tasa registrada en 2014”.

“En tres de cada cuatro países, a los trabajadores se les negó el derecho a la libertad de asociación y de organizarse, sin cambios desde 2024”.

“Los trabajadores sufrieron violencia en el 26% de los países, frente al 29% en 2024”.

La información reunida en el Índice de 2025 pone en evidencia el incremento del autoritarismo, la regresión de los valores democráticos y el aumento de la represión contra los sindicatos y las personas trabajadoras en el mundo. Asimismo, ofrece un enfoque detallado del grado de respeto de los derechos fundamentales y del acatamiento a las libertades democráticas de las personas trabajadoras a nivel internacional. En el Índice, donde se clasifica a los países en función de cómo apliquen los derechos sindicales y laborales, se concluye que en el año 2025 los derechos de los trabajadores y trabajadoras sufren un grave retroceso.

Durante el periodo detallado, distintos gobiernos adoptaron medidas represivas, violaron el derecho de huelga, el derecho a la negociación colectiva e impidieron el registro administrativo de los sindicatos; el acceso de los trabajadores a la justicia se ha visto restringido, se han reprimido las libertades de expresión y de reunión, se han efectuado arrestos y detenciones arbitrarias de trabajadores, se han producido actos de violencia contra las personas trabajadoras y han sido asesinados sindicalistas.

En referencia a la Argentina, describe que nuestro país ofrece uno de los ejemplos más claros del deterioro de las libertades civiles y del ataque concertado contra sindicatos y trabajadores bajo gobiernos de ultraderecha. Aclara que desde el inicio del gobierno de Javier Milei se ha tratado de modificar constantemente la legislación para desregular las condiciones de trabajo y salariales, eliminar las protecciones sindicales y privatizar empresas públicas.

En el informe se aclara cómo las reformas antisindicales de Milei quebrantan aún más los derechos e intereses de los trabajadores. También remarca que las libertades civiles y democráticas también se han visto amenazadas. El Protocolo represivo “antipiquete” de 2023, impulsado por la ministra de seguridad Bullrich, es considerado una medida contra las protestas y las acciones de los trabajadores y sus organizaciones; el mismo autoriza a las fuerzas de seguridad a reprimir las manifestaciones,  los trabajadores se enfrentan a graves sanciones judiciales y sistemáticos abusos represivos.

Es importante resaltar que el informe considera que las violaciones de los derechos que sufre el mundo del trabajo se producen en un contexto internacional marcado por el ascenso de la ultraderecha, el aumento de las desigualdades, las políticas reaccionarias de Donald Trump y las guerras: Rusia mantiene su invasión de Ucrania, Israel perpetra un genocidio en Gaza y asimismo subsisten varios conflictos en Asia y África. Frente a este aumento bélico, se proclama que “el sindicalismo global exige la paz y condena los actos criminales, y en su lucha por la democracia y la igualdad demanda un nuevo contrato social basado en el respeto de los derechos humanos, el trabajo decente y la justicia social”.

Accedé el informe completo aquí